El 7 de octubre de 2025, colectivos de madres buscadoras de Aguascalientes reportaron el hallazgo de restos óseos en una zona rural del municipio de Asientos, comunidad Lázaro Cárdenas. Las brigadas continúan trabajando con antropólogos forenses para determinar identidad, contexto y tiempo de depósito.
Este suceso ocurre en un escenario cada vez más peligroso para quienes buscan víctimas de desaparición forzada. De acuerdo con informes de Amnistía Internacional, al menos 16 mujeres buscadoras han sido asesinadas en los últimos años por ejercer esta labor, y casi todas han sufrido amenazas, agresiones y hostigamiento sistemático.
Asimismo, colectivos han denunciado recientes hostigamientos por parte de policías locales, que en Chiapas habrían arrebatado lonas, agredido físicamente y amenazado con armas a buscadoras que se manifestaban pacíficamente.
El 2025 se perfila como el año más mortal para madres y padres buscadores en México. Desde el inicio del año, se han documentado al menos 8 homicidios de personas ligadas a estos colectivos, elevando el total acumulado desde 2010 a 36.
Las madres buscadoras desempeñan un rol crucial en la visibilización de los desaparecidos en México, actuando ante la discrecionalidad o ineficacia de instancias estatales. Sin embargo, su labor sigue desarrollándose bajo riesgo constante por la colusión del crimen organizado, falta de recursos institucionales y omisiones de autoridades.
Activistas han exigido al Estado mexicano garantías de seguridad, protección legal especial y políticas de reparación para las familias afectadas. También demandan que la búsqueda no sea criminalizada ni minimizada como una actividad política sino reconocida como parte de una obligación del Estado ante el delito de desaparición.
México evita aranceles de EE. UU. y preserva flujo de 839 mil millones con apoyo al TMEC
En marzo de 2025, México logró una prórroga temporal para evitar que Estados Unidos impusi…